Conoce las opciones disponibles para asegurar una vivienda

El seguro del hogar nos permite proteger nuestra casa y posesiones en caso de que surja un accidente. Una opción que está disponible tanto si eres propietario como inquilino. En la entrada de hoy vamos a hablar de este tema. Conoceremos las diferencias entre ambos tipos de seguros y analizaremos sus principales características.

¿Qué cubre un seguro del hogar?

Los seguros del hogar pueden cubrir el continente de la casa. Por ejemplo, los muros, tejados y zonas comunes. Y también el contenido, es decir, electrodomésticos, muebles y otras pertenencias. La ley siempre nos va a exigir que protejamos el continente, nunca el contenido. Preocupación que también comparten los bancos.

El valor del continente debe ajustarse en función de la construcción y no del precio actual. Es decir, que se tiene en cuenta la tasación de un perito en lugar de la cantidad por la que podrías venderla en el mercado. Por lo tanto, si se produce un siniestro, la aseguradora te va a indemnizar con un importe mucho menor que lo que realmente cuesta.

Seguro del hogar para inquilinos

Si eres propietario de una vivienda la ley exige que contrates un seguro del hogar. No ocurre lo mismo si vives de alquiler. En este caso, es el arrendador el que tendrá que afrontar los gastos. Sin embargo, lo más probable es que solo asegure la casa. Es decir, que tus posesiones estarán totalmente desprotegidas. 

¿Qué podemos hacer? Pues llegar a un acuerdo con tu casero. Quizás incrementando las coberturas del seguro que tiene contratado, pagando tú la diferencia. Otra alternativa es elegir un seguro del hogar que sea muy económico. O alguno de los modelos especialmente diseñados para inquilinos. De esta forma, si hay una sobrecarga de tensión y tus aparatos eléctricos sufren las consecuencias, estarás cubierto.

Además, si no tienes tu propia póliza de seguro, cualquier desperfecto en la vivienda que hayas provocado tendrás que pagarlo. Por ejemplo, si te has dejado el grifo abierto y se ha inundado la casa. Provocando además goteras en el piso de abajo. O sufres un accidente en la cocina y se acaba incendiando. Si no hemos sido precavidos, no nos quedará más remedio que hacer frente a unos gastos considerables.

Seguro del hogar para arrendadores

Si alquilar tu propiedad, la ley te obliga a contratar un seguro contra incendios. No obstante, existen una enorme variedad de coberturas adicionales que podemos solicitar. Siendo una de las más interesantes la protección ante inquilinos no pagan la renta. De cualquier forma, incluye solo las coberturas que realmente vayas a necesitar.

Seguro del hogar para propietarios

Como hemos visto anteriormente, la normativa española te exige cobertura contra incendios. Pero las entidades bancarias suelen ir un paso más allá y además te pedirán que contrates un seguro multirriesgo o similar. ¿El motivo? Al fin y al cabo, nuestra vivienda es la garantía que ellos tienen para recuperar el préstamo hipotecario.

Esto no significa que tengas que contratar el seguro con el banco donde solicitaste el préstamo para tu vivienda. Eres libre de elegir la entidad que prefieras. Pero si las condiciones no coinciden con lo propuesto por el banco, puede provocar un aumento considerable en los gastos de la hipoteca.