Si eres propietario de una vivienda, cada año tendrás que afrontar el pago del IBI, un impuesto bastante complejo que suele suscitar muchas dudas entre los usuarios. ¿Quieres saber cómo se calcula el IBI? ¿Por qué cambia su valor cada año? Pues entonces te recomendamos que no te muevas del asiento.
¿Quién paga el IBI?
El Impuesto sobre Bienes Inmuebles es una de las principales fuentes recaudatorias de los ayuntamientos y la responsabilidad de pagarlo recae siempre sobre los propietarios. ¿Qué ocurre en caso de vender una vivienda? Según la normativa, el IBI es responsabilidad del propietario con fecha a 1 de enero. No obstante, desde 2016, existe una cláusula específica en el contrato para que el comprador se haga cargo de la parte proporcional que le toca.
Hablemos ahora de las viviendas de alquiler. Lo más habitual es que todos los gastos generales del inmueble, a excepción de los suministros básicos, sean afrontados también por el propietario, como es el caso de la comunidad, el seguro del hogar o el IBI. Pero eres libre de pactar las condiciones que quieras con el arrendatario, como por ejemplo compartir los gastos.
¿Cómo se calcula el IBI?
El Impuesto sobre Bienes Inmuebles tiene en cuenta diversos factores como el valor catastral, el tipo impositivo aplicable o las bonificaciones de la vivienda. En cualquier caso, son los propios ayuntamientos los que se encargan de calcularlo.
Valor catastral
El valor catastral es el precio que según la administración vale tu casa. Se basa en la ubicación, la calidad de los materiales de construcción, los años que tenga, el valor del suelo y otros elementos. Si quieres tener una idea aproximada, lo más sencillo es que eches un vistazo al IBI de años anteriores. ¿No los has guardado? Puedes volver a solicitarlos en el Catastro.
Tipo impositivo
Tras haber averiguado el valor catastral de tu vivienda, la siguiente tarea es descubrir qué tipo impositivo se aplica. De nuevo, se trata de un porcentaje que fijan los ayuntamientos, por lo que no te quedará otra que acudir a tu consistorio local y preguntar a un técnico. Para que te hagas una idea, suele estar entre el 0,4 % y el 1,3 %.
Bonificaciones de la vivienda
Ya hemos descubierto cómo se calcula el IBI, aunque algunos inmuebles disfrutan de una serie de bonificaciones en el pago de este impuesto. Uno de los ejemplos más comunes son las Viviendas de Protección Oficial o VPO. Aunque también se benefician las cooperativas agrarias o las casas residenciales destinadas a alquiler.
Además de estas bonificaciones estatales y obligatorias, cada ayuntamiento tiene la competencia de establecer sus propias bonificaciones según dictamina la Ley de Haciendas Locales. Suelen estar destinadas a colectivos en riesgo de exclusión social o con problemas económicos, así como a las familias numerosas.
¿Por qué el IBI cambia cada año?
Una de las principales quejas de los consumidores es el gasto creciente que supone el IBI cada año. Este aumento se debe a los cambios en los valores catastrales, que se actualizan regularmente para adaptarlos a la nueva realidad del mercado.